La frase ‘crisis economica’ protagoniza hoy el lenguaje entre nosotros, aun mas que ‘hola’. La crisis economica da la vuelta al mundo y se vuelve a su punto de partida lista para dar la otra vuelta. ‘Crisis economica’ mete en su saco a paises, instituciones, compañias, y tambien a las iglesias. Templos se estan perdiendo porque no se pueden pagar. Mi proposito no es hacer una evaluacion de las afectaciones economicas de las iglesias, sino mas bien hablar sobre un fenomeno eclesiastico que esta ocurriendo  ahora mismo en mi pais (USA). Un fenomeno que yo he catalogado como ECUMENISMO ECONOMICO.

Una de las incidencias de ‘crisis economica’ es en el precio de la gasolina. Eso repercute en varios renglones mas de la economia. Es notable el alza de los precios en varios productos que dependen del transporte para su distribucion. Son productos de primera necesidad como la leche por poner un ejemplo. Pero el precio de la gasolina tambien ha hecho que muchos creyentes comiencen a buscar una nueva iglesia donde ir a congregarse ya que la que tenian antes de la crisis les queda lejos de su residencia y eso incrementa los costos de la canasta familiar. Muchos creyentes han tenido que hacer una busqueda de iglesias alrededor de su vecindario tratando de ubicar una iglesia que le satisfaga en su necesidad de congregarse.

¿En que consiste el ECUMENISMO ECONOMICO? No siempre el creyente encuentra una iglesia de su denominacion alrededor de su vecindario, porque no siempre la hay. Es ahi cuando tiene que comenzar a escoger entre una iglesia presbiteriana, o una iglesia metodista, o una iglesia pentecostal, o una iglesia bautista. Hay creyentes bautistas congregandose en iglesias presbiterianas, hay creyentes presbiterianos congregandose en iglesias metodistas, y es ahi donde se esta dando este ecumenismo economico que ha llegado invitado por ‘crisis economica’.

Alrededor de este fenomeno real podemos hablar algunas cosas. El deseo de los creyentes de congregarse, es bueno. La necesidad de adorar publicamente a Dios, es bueno. Pero tambien el creyente va ahora a verse ante doctrinas que no pertenecian a su anterior estatus eclesiastico y que van a comenzar a hacer tema de conversacion en su familia o con otros creyentes. El pentecostal que asiste a una iglesia presbiteriana va a comenzar a hablar del bautismo de los niños. El bautista que asiste a una iglesia pentecostal va a comenzar a hablar del estilo de la alabanza y de los dones del Espiritu. El presbiteriano que asiste a una iglesia bautista va a comenzar a hablar de como es el gobierno eclesiastico tan distinto. ¿Que puede salir de todo esto? No soy adivino ni conozco el futuro pero de algo sí estoy seguro: los creyentes estan siendo desafiados a estudiar mas la Palabra buscando conocer mas de aquellas doctrinas que no eran comunes a su denominacion eclesiastica. Los creyentes estan siendo desafiados a analizar esas doctrinas mas detalladamente en busca de su apoyo biblico. Los creyentes estan siendo desafiados a soltar el sectarismo denominacional que quizas tenian fuertemente agarrado. Y pienso que todo eso, tambien es bueno.

Sobre todo, estoy viendo tambien que el creyente esta siendo desafiado a darse cuenta que la Iglesia de Jesucristo es Universal, NO DENOMINACIONAL…..y eso, tambien es bueno.

¿Es bueno este ECUMENISMO ECONOMICO? ….visto asi, de forma general, yo pienso que ni es bueno, ni es malo….solo pienso que……es. Yo pienso que lo importante no es catalogarlo de ‘bueno o malo’ sino de darnos cuenta que cosas buenas tiene en si, que pueden cooperar juntas para la edificacion de los creyentes.

Yo pienso ademas,  que de nuevo estamos siendo confrontados con la misma pregunta que Dios le hizo a Moises: «¿QUE ES ESO QUE TIENES EN TU MANO….?» (leer Exodo 4:2)

¿Que piensas tu?

«…y sobre esta roca edificaré mi iglesia; y las puertas del Hades no prevalecerán contra ella.» Mateo 16:18 LBLA

SOLI DEO GLORIA.