LA TEOLOGÍA DEL PACTO

Abraham prayingLa Teología del Pacto enseña la unidad de las Escrituras y el Pacto de Gracia a través de toda la historia. Contempla los pactos como una especie de sub-pactos de un mismo Pacto de Gracia administrado de formas diferentes pero el mismo en esencia y con los mismos principios.

Hace poco hablaba con unos hermanos Bautistas Particulares y me decían que creían en la Teología del Pacto pero que no creían en el Bautismo de niños. Esto para mí fue algo extraño. No entendía que no entendieran y que se les hiciera tan difícil entender la similitud de los pactos si veíamos y entendíamos que era el mismo solo con maneras externas distintas.

Con el tiempo descubrí que los llamados «Bautistas Reformados» tenían su propia Teología del Pacto diferente a la heredada de la Reforma para así mantenerse como credobautistas y engañar a aquellos que querían seguir los postulados verdaderos de la Reforma.

Esta falsa Teología del Pacto es lo más parecido al dispensacionalismo progresivo, amputa la Escritura, rompe con su unidad y pasa por encima los Pactos antiguos para pasar del Pacto de Redención, elaborado en la eternidad, para traerlo al Evangelio, ignorando los pactos previos y la luz que emanan de ellos.

Por este motivo, ignorando el Pacto Eterno de Abraham con su señal sobre los niños bajo la circuncisión, y reemplazado en el evangelio por el bautismo, deducen bajo una interpretación aislada y letrista del Nuevo Testamento que solo los adultos profesantes se pueden bautizar.

Para mayor engaño lo han querido convertir en una especie de pugna entre presbiterianos y bautistas reformados ¡Nada más lejos de la verdad! La Reforma es mucho más que denominaciones y su teología es clara, por no hablar de la inconsistencia de autodenominarse «Bautista Reformado», porque la Reforma en sí rechazó a aquellos que rechazaban el bautismo de los niños de padres cristianos. Es como autodenominarse pentecostal y decir que no cree en la vigencia de las lenguas o las imposiciones de manos para sanidad divina.

Con todo, sobra decir que quien quiera seguir esta forma de Teología del Pacto es libre de hacerlo, pero es necesario que todos sepan que no es la verdadera Teología del Pacto heredada de la Reforma bajo el fundamento de los apóstoles y profetas de nuestro Señor Jesucristo.

Para concluir cito la Confesión Reformada de Westminster:

7. Del Pacto de Dios con el hombre
V. Este pacto era ministrado de un modo diferente en el tiempo de la ley y en el del Evangelio. Bajo la ley se ministraba por promesas, profecías, sacrificios, la circuncisión, el cordero pascual y otros tipos y ordenanzas entregados al pueblo judío; y todos señalaban al Cristo que había de venir, y eran suficientes y eficaces en aquel tiempo por la operación del Espíritu Santo, para instruir y edificar a los elegidos en fe en el Mesías prometido, por quien tenían plena remisión de pecado y salvación eterna. A este pacto se le llama el Antiguo Testamento.

¡Dios les bendiga!

Juan Sanabria Cruz
– Pastor –